La Comisión Europea ha aprobado un nuevo reglamento para reducir los niveles de las emisiones de gases fluorados en dos terceras partes desde ahora hasta el 2030. Esta nueva normativa, prohíbe el uso de gases fluorados en algunos equipos nuevos, como los frigoríficos, que ya tienen alternativas más respetuosas con el clima.

La propuesta presenta la eliminación gradual de estos gases limitando, a partir del 2015, la cantidad total de los grupos más importantes de gases fluorados, los hidrofluorocarburos (HFC), que pueden comercializarse en la UE y los reduce por etapas a una quinta parte de las ventas actuales para el 2030. Este nuevo reglamento –que sustituirá al vigente- prevé, y también quiere facilitar, el cese gradual en todo el mundo de la producción y consumo de los HFC.

Desde la Comisión Europea se hace un llamamiento a consumidores y usuarios comerciales de aparatos que utilizan estos gases para que “lideren el cambio” y “estimulen el desarrollo tecnológico” en todos los sectores que utilizan fluorados en la actualidad.

Los gases fluorados son aquellos que se utilizan en refrigeración, aire acondicionado, equipos eléctricos, aerosoles gas, espumas de aislamiento o extintores de incendios. Se utilizan en instalaciones de producción, en sus aparatos, y es durante su uso que se producen emisiones a la atmósfera.

Los gases fluorados tienen un efecto de calentamiento en la atmósfera 23.000 veces más que el dióxido de carbono. Con el nuevo plan, se prevé una reducción de emisiones en más del 70% para 2030 en el sector industrial que incluye estos gases.