Apnea Obstructiva del Sueño (AOS)

¿Qué es la AOS?

La apnea obstructiva del sueño (AOS) es el más frecuente de los trastornos respiratorios que se producen durante el sueño. Se caracteriza por la presencia de episodios repetidos de obstrucción completa (apneas) o parcial (hipoapneas) de la vía respiratoria superior debido a la relajación de los músculos de la garganta, o bien a la existencia de una o varias zonas estrechas en la vía aérea superior (desde la nariz hasta la glotis).

Las apneas provocan disminución de oxígeno en la sangre, que puede ser muy severa, y un pequeño despertar que el durmiente no percibe, pero que le permite recuperar la respiración normal hasta que se produce el siguiente episodio. Si esto se repite muchas veces por hora en una noche, el resultado es un sueño no reparador que el paciente nota al despertar y que provoca somnolencia excesiva durante el día, alteraciones de carácter, irritabilidad, depresión, ansiedad, pérdida de la memoria, dificultad para aprender y disfunción sexual.

La AOS también puede asociarse a hipertensión arterial, enfermedad cardiovascular y trastornos del ritmo cardíaco, alteraciones metabólicas, trastornos del área cognitivo-conductual, accidentes de tráfico y peor calidad de vida.

¿A quién afecta la AOS?

La AOS puede afectar a personas de cualquier edad, incluidos niños y niñas. No obstante, la mayor prevalencia se da en hombres mayores de 65 años, mujeres tras la menopausia o personas adultas con patologías previas como hipertensión, obesidad o consumo excesivo de tabaco y alcohol.

En España se calcula que lo padecen entre un 6 y un 8% de la población, de la cual más del 80% no está diagnosticada y, por tanto, no recibe el tratamiento correcto.

Síntomas de la AOS

La señal más notoria de padecer apnea del sueño son los ronquidos o las pausas en la respiración durante el sueño. También pueden aparecer otros síntomas como fatiga durante el día, dolores de cabeza al despertar, somnolencia diurna o problemas de memoria.